Cada vez son más los expertos que recomiendan la lactancia a demanda, es decir, dar el pecho sin tener en cuenta horarios ni el tiempo de duración de las tomas, sino solamente si el bebé tiene hambre, ya sea de día o de noche. Así, tanto el número de tomas como la duración de éstas dependerán completamente del bebé. Eso sí, es importante tener en cuenta que los recién nacidos no deben pasar más de 3 horas sin comer.
El problema es que a veces cuesta saber si el pequeño de la casa necesita mamar. Por eso, hoy en Rincón del Peque queremos darte las claves para que sepas si tu bebé está dando muestras de que tiene hambre.
Antes de que llore
Es muy importante que estés atento a las señalas que lanza el bebé, ya que éstas te dirán si tiene o no tiene hambre. Además, a la mínima señal deberás amamantarle para que no se altere y llore. Eso sí, ten en cuenta que el hecho de que llore no siempre quiere decir que necesite mamar, sino que requieren un cambio de pañales, están aburridos, tienen frío o calor…
Buscando el pecho
Una de las señales claras de que el bebé tiene hambre es el movimiento de la cabeza de un lado al otro, que indica que está buscando el pecho, sobre todo si se mueve abriendo la boca o sacando la lengua. Por otra parte, debes saber que los pequeños con hambre suelen llevarse las manos y los puños a la boca. También es importante que tengas en cuenta que, cuando tienen hambre, muchos bebés fruncen los labios como si estuvieran succionando.
Para estar segura
Para estar segura de si tu pequeño tiene hambre, puedes ponerte el bebé encima. Si restriega la boca contra tus pechos, es que necesita mamar. Además, también puedes acariciarle una de las mejillas para comprobar si gira la boca hacia ese lado, lo que querrá decir que debes darle el pecho.