Tenemos a nuestra disposición tal cantidad de métodos anticonceptivos que muchas veces nos cuesta decantarnos por uno de ellos. Lo que debes tener muy en cuenta es que, aunque algunos de ellos son efectivos contra el embarazo, no protegen de las enfermedades de transmisión sexual, también conocidas como ETS. Es el caso del diafragma, un capuchón de goma flexible que se introduce en la vagina.
Si estás pensando en utilizar este método anticonceptivo, será mejor que conozcas tanto sus ventajas como sus desventajas. ¡Te las contamos a continuación!
Ventajas
La principal ventaja de este método es que es reversible y, de hecho, no tiene efectos negativos sobre la fertilidad. Por otro lado, debes saber que al poder colocarse antes de la relación sexual, no interrumpe los momentos de pasión.
Ideal para mujeres que no quieren o no pueden usar métodos anticonceptivos hormonales (no produce ninguno de sus efectos secundarios), puede usarse durante la lactancia. Además, el diafragma es económico, ya que cuesta 50 euros pero puede durar dos años.
Inconvenientes
La primera desventaja que debemos destacar es que su seguridad contraceptiva es limitada. En concreto, ofrece unas tasas de efectividad que oscilan entre el 80% y el 94%. También es importante tener en cuenta que este método no protege frente a todas las ETS, incluyendo algunas tan graves como el VIH/SIDA. Además, incrementa el riesgo del síndrome del shock tóxico y puede producir reacciones alérgicas o irritación.
También es importante tener en cuenta que, para muchas mujeres, la colocación de este capuchón resulta difícil. Es más, debido a cambios en la estructura corporal, las mujeres que ya han tenido hijos pueden tenerlo complicado para adaptar el diafragma. Por eso, las posibilidades de embarazo en estos casos es mayor. Además, es importante tener en cuenta que no se recomienda su uso durante la menstruación.
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