¿Has tenido la oportunidad de ir a esquiar con niños? Pues entonces sabrás que puede convertirse en una gran experiencia, repleta de momentos inolvidables. La clave está en conseguir que el pequeño se divierta y no vea la nieve como algo negativo (viento, frío, humedad, caídas…), sino todo lo contrario, es decir, un lugar dónde pasárselo en grande.
Lo cierto es que a los peques de la casa les suele encantar la nieve y, además, tienen una gran facilidad para aprender a esquiar. Eso sí, te recomendamos que sigas los siguientes consejos para que todo vaya sobre ruedas. ¿Te gustaría acompañarnos?
Edad
Lo primero que queremos comentar es que los niños pueden comenzar a disfrutar de la nieve desde que son bien pequeños. Eso sí, para aprender a esquiar, te aconsejamos que el pequeño tenga cierto equilibrio y autonomía. Así, a partir de los 4 o 5 años pueden empezar a habituarse con el material y los remontes, aunque será a partir de los 7 cuando podrás ver progresos, ya que tendrán más fuerza en todo el cuerpo.
Oferta para niños
A la hora de escoger una estación de esquí te recomendamos fijarte en su oferta para niños. Así, por ejemplo, esquiar en Formigal, en el Pirineo Aragonés, es una fantástica idea, ya que los peques pueden disfrutar de jardines de nieve en los que divertirse y disfrutar durante su jornada. Se trata de lugares excelentes para que tengan el primer contacto con la nieve. Por otra parte, debes saber que lo ideal es que el pequeño de la casa comience a esquiar con un monitor de esquí, ya que éste contará con las herramientas pedagógicas necesarias para enseñarle.
Equipamiento
Por supuesto, el niño deberá ir a la nieve perfectamente equipado, especialmente si va a esquiar. Así, deberá llevar la indumentaria adecuada, es decir, impermeable y abrigada. Eso sí, al abrigarlos, lo mejor es hacerlo en capas para que, en caso de tener calor, puedan quitarse prenda por prenda. Además, es importante el uso del casco para evitar traumatismos en la cabeza, gafas de sol para proteger los ojos y guantes. También se recomienda el uso de protecciones dorsales y llevar un cambio de ropa y calcetines por si se mojan. Por último, debes saber que la protección solar es esencial para evitar quemaduras.