Son muchas las dudas que asaltan a los padres primerizos. Por ejemplo, son muchos los progenitores que se preguntan cuándo hay que comenzar a darle agua al bebé. Y es que, como bien sabes, durante los primeros meses a los niños les vale con el líquido que ingieren a través de la lactancia o los biberones.
Hoy en Rincón del Peque queremos aclararte esta gran duda, explicándote cuándo hay que empezar a ofrecerle agua al pequeño de la casa. ¿Te gustaría acompañarnos?
Hasta los seis meses
Lo primero que debes tener en cuenta es que hasta los seis meses de vida, la cantidad de agua que un bebé necesita (unos 700 ml), está cubierta por la leche materna o la artificial. De hecho, no es recomendable darle al pequeño agua hasta esa edad, ya que se le llenaría la barriga de líquido sin nutrientes, que es lo que verdaderamente necesita, y bebería menos leche.
A partir de los 6 meses
Si el bebé sigue alimentándose de la leche materna a partir de los seis meses, aun cuando se ha iniciado la alimentación complementaria, no será necesario darle agua, aunque tampoco es mala idea darle una pequeña cantidad si come algún alimento que pueda darle sed como, por ejemplo, las galletas. En cambio, los niños que toman leche artificial sí que pueden necesitar más agua.
A partir del año
Es a partir del año cuando el niño debe comenzar a ingerir bastante cantidad de agua. Los expertos recomiendan 1,3 litros al día, que provendrán de los alimentos y del agua que beben. Para que te hagas una idea, deberás ofrecerle alrededor de 4 vasos de agua al día. En cuanto al agua que debes darle, es preferible la envasada, aunque siempre de mineralización débil. Solo deberás darle agua procedente del grifo si tienes garantías de que es potable.