¿Sabías que los accidentes de coche se encuentran entre las cinco primeras causas de muerte en España? Y no solo eso, sino que cada año alrededor de 500 personas comienzan a depender de una silla de ruedas por culpa de ellos. En nuestra mano está evitar buena parte de los accidentes y, por supuesto, disminuir sus consecuencias. En el caso de los niños, por ejemplo, es necesario que viajen con una silla homologada para su peso y talla. Además, debes saber que los expertos recomiendan que lo hagan siempre en el sentido contrario de la marcha.
¿Quieres saber por qué llevar a los pequeños en sentido contrario es más seguro? ¡Pues será mejor que nos acompañes!
El cuerpo queda protegido
Según varios estudios, llevar al niño en sentido contrario a la marcha es mucho más seguro. Esto se debe a que los pequeños tienen la cabeza relativamente más grande y el cuello algo más débil que un adulto. Por eso, si está sentado en el sentido de la marcha y se produce un choque, la cabeza se proyecta hacia delante con fuerza, generando mucha tensión tanto en el cuello como en la columna vertebral y los órganos internos. Por el contrario, si va sentado en el sentido contrario, las fuerzan le pegan al respaldo del asiento, por lo que su cuerpo queda protegido. De hecho, se reduce el riesgo de lesiones graves hasta en un 80%.
Lo que dice la normativa
Por supuesto, hoy en día es posible encontrar en el mercado sistemas de retención infantil que permiten llevar al pequeño de esta manera. De hecho, podrás encontrar modelos de este tipo para niños de hasta 4 años de edad. Lo que dice la normativa en España es que siempre que el fabricante indique que la silla puede instalarse en sentido contrario a la marcha, se recomienda que los niños viajen en esa posición el mayor tiempo posible.
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