La belleza de los poemas infantiles llega a los niños a través de formatos diferentes. Los recitales son propuestas culturales que pueden integrarse en el ámbito académico o en actividades de tiempo libre. Por ejemplo, las bibliotecas añaden este tipo de iniciativa en su agenda de ocio. ¿Qué ventajas aportan los recitales de poesía para niños?
1. Lectura en voz alta y compartida
La experiencia de leer va más allá del punto de vista personal e individual. Existen versos que unen al grupo en torno a una misma voz y una secuencia de versos que destaca por su musicalidad. Un recital es un espacio de encuentro, escucha, reflexión, diálogo y conversación.
2. Un proyecto que se dirige a un público intergeneracional
Un recital de poesía para niños pone el acento en obras dirigidas al público infantil. Sin embargo, su propuesta de valor se centra en un sector intergeneracional. Es decir, abuelos, padres y niños, y otras personas de la misma familia, pueden asistir al acto. Cada uno disfruta de la belleza sonora de los versos y del significado de las palabras desde su punto de vista.
3. Bienestar emocional
La lectura recreativa puede potenciar la calma y la tranquilidad. Pues bien, un recital de poesía crea una atmósfera acogedora en el entorno: facilita la escucha, la concentración, la tranquilidad y el bienestar emocional. La musicalidad de los versos, la belleza de los recursos estilísticos y el tono intimista de la poesía alimentan la sensibilidad y la felicidad.
4. Desarrollo de habilidades comunicativas
La participación en recitales de poesía para niños, al igual que otras actividades de animación a la lectura, incide de manera positiva en el desarrollo de habilidades comunicativas. Favorece la ampliación del vocabulario, el mantenimiento del ritmo, el cuidado de la entonación y la pronunciación.
Por tanto, los recitales de poesía para niños son educativos, culturales, literarios, creativos y emocionantes.