Los valores que se integran en un proyecto de educación familiar siempre son importantes. ¿Cómo educar en la empatía, la generosidad y el respeto a un hijo único? En Rincón del Peque compartimos seis consejos.
1. Potencia su autonomía
La sobreprotección del entorno limita el desarrollo de aquellas capacidades que puede poner en práctica el hijo único. Por ello, conviene crear un ambiente de aprendizaje que propicie la evolución, el desarrollo y el descubrimiento en un escenario seguro.
2. Empatía parental
¿Cómo fortalecer el vínculo afectivo con el hijo único? La empatía parental es clave para nutrir la confianza, la cercanía afectiva y el acompañamiento.
3. Elogios sinceros y positivos
Todo ser humano es especial porque su esencia y su historia de vida es irrepetible. Aquello que hace que un niño sea realmente único no depende de no tener hermanos. Las caricias emocionales, el refuerzo positivo y los elogios nutren la autoestima infantil. Pero los elogios nunca deben potenciar el ego, la vanidad o las comparaciones personales.
4. Participación en proyectos de equipo
El niño aprende el valor de la colaboración, el compañerismo y la ayuda mutua en aquellos espacios que propician la búsqueda del bien común. Es decir, puede participar en proyectos de equipo como el deporte o los juegos de grupo.
5. Elección de un colegio que se alinea con los valores familiares
La familia y el colegio son dos pilares esenciales en la educación infantil. Generalmente, los progenitores construyen un vínculo duradero con la escuela. Es recomendable que los principios del centro se alineen con aquellos valores que se quieren transmitir al hijo único.
6. Educar la sensibilidad artística
El contacto con el arte está directamente vinculado con los valores humanos. Por ello, el descubrimiento de la literatura, la danza, el cine, la música, el teatro, la fotografía o la pintura es positivo para los niños.