¿Qué es la infertilidad secundaria? Un proyecto de vida puede estar marcado por objetivos diferentes. En ocasiones, después de tener un primer hijo, surge el propósito de ampliar la familia. Pero una meta tan deseada no siempre se hace realidad o tarda más tiempo del previsto en materializarse. Existe un término que pone de manifiesto esta cuestión: infertilidad secundaria. ¿Qué significa dicho concepto?
Cuando surgen dificultades para tener un segundo hijo
Es posible poner en relación este concepto con el de infertilidad primaria. Este último hace referencia al hecho de no haber logrado un embarazo después de haberlo intentado durante un año. Pues bien, la infertilidad secundaria afecta, por el contrario, a aquellas parejas que ya han tenido un hijo. Y, sin embargo, a pesar de desearlo, no han conseguido un nuevo embarazo. Existen distintos factores que pueden influir en dicho diagnóstico. La edad es una de las variables más importantes. Pero existen otras causas posibles como, por ejemplo, la endometriosis o la obesidad.
Es un diagnóstico que también produce un efecto en el plano psicológico y emocional. Las parejas habían visualizado un nuevo objetivo en su proyecto de vida compartido en común. Y, sin embargo, tras haber descubierto la paternidad y la maternidad, experimentan dificultades para ampliar la familia. En un proceso de estas características es posible experimentar estrés, tristeza, frustración y decepción. Los protagonistas afrontan un proceso que pone a prueba su capacidad de resiliencia. Los tipos de infertilidad descritos en el artículo afectan a hombres y mujeres.
Consultar las dudas con un experto en fertilidad
Es habitual que las parejas experimenten dudas. Por ello, un diagnóstico especializado es esencial para clarificar la información y poder valorar distintas alternativas de tratamientos. Un diagnóstico es clave para conocer el motivo por el que no se produce un nuevo embarazo.
¿Qué es la infertilidad secundaria? Un diagnóstico que puede materializarse después de haber tenido un hijo.