Una de las cosas que los padres deben tener en cuenta es que pasar tiempo en familia es muy importante para el correcto desarrollo emocional y psicológico del niño. Por tanto, cada día es necesario buscar momentos que pequeños y grandes puedan compartir.
Una de la actividades que padres e hijos pueden hacer juntos es la de cocinar. Además, resulta súper beneficiosa para los más pequeños de la casa. ¿Quieres conocer todas las cosas buenas que tiene cocinar con los pequeños de la casa? ¡Pues estate muy atento a lo que te contamos a continuación!
Conexión con los alimentos
Lo primero que hay que tener en cuenta es que, cocinando, los niños conectan de forma diferente con los alimentos, incluyendo las frutas y las verduras, por lo que luego les costará menos comérselas. De hecho, manipulando la comida prestarán más atención a su consistencia, sabor y aroma, mejorando su capacidad sensorial. De la misma forma, también ayuda a que los pequeños valoren más el esfuerzo de sus padres a la hora de hacer la comida.
Aprender y poner en práctica conocimientos
Por otro lado, es importante saber que, cocinando, los niños practican conocimientos ya adquiridos y aprenden otros, además de desarrollar diferentes capacidades. Por ejemplo, llevando a cabo una receta los pequeños podrán poner en práctica ciencias como las matemáticas y la química. Además, puedes aprovechar que el pequeño está en contacto con los alimentos para explicarle qué propiedades tiene cada uno de ellos y qué son las vitaminas, el potasio, los hidratos de carbono…
Estrechar lazos
Por último, debes saber que cocinar con los niños es muy beneficioso para la familia en general, ya que realizar actividades juntos ayuda a estrechar lazos. Y es que durante este tiempo podréis hablar y compartir todo tipo de experiencias.