Con el verano, también llegan las picaduras de insectos que, aunque no suelen producir problemas de salud importantes, sí que resultan muy molestas, especialmente para los niños.
Para aliviar los síntomas de una picadura no se puede hacer gran cosa: lavarla con agua fresca y jabón, aplicar una solución de calamina o amoniaco, aplicar frío local… Lo que sí que podemos hacer es poner en práctica algunas medidas para evitar las picaduras durante esta época del año. ¡Te contamos algunas de las que nos recomiendan desde la Asociación Española de Pediatría (AEP)!
Lo que debes hacer en el exterior
Lo primero que nos aconsejan es que evitemos los paseos cerca del agua al caer el sol. Es más, si vas al campo con tus hijos y hay agua cerca, es muy recomendable que los niños vistan con pantalones largos, camisetas de manga larga y calcetines de colores claros. Además, debes saber que no es buena idea sentarse en el suelo. Por eso, lo mejor es llevar una manta.
Además, desde la AEP recomiendan enseñar a los pequeños a no levantar piedras, ya que los escorpiones y las víboras suelen esconderse debajo. Por suerte, las especies de escorpión que existen en España son poco peligrosas.
Aplicar repelentes
También es buena idea que apliques en las zonas descubiertas de los pequeños un repelente de insectos. Eso sí, es muy importante que evites la zona de la boca, los ojos y las manos. Además, debes saber que tienes que aplicar este tipo de productos después del protector.
Lo que debes hacer en casa
Como bien sabes, los mosquitos y otros insectos aprovechan las noches para picar. Por eso, en la habitación de los pequeños no deberían faltar mosquiteras y/o repelentes eléctricos. Y si tienes un perro en casa, no olvides ponerle un collar antipulgas.
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