Los juegos de mímica encantan a los niños. Esta diversión puede disfrutarse en el propio hogar. ¿Cuáles son las ventajas de esta experiencia de ocio?
1. Expresión corporal
Existen distintas formas de comunicación que propician la socialización. El lenguaje corporal, acompañado por los gestos y el movimiento, expresa un mensaje. Esta es una forma de comunicación con años de historia. Como en cualquier proceso de comunicación existe una interacción, un emisor, un receptor, un contexto y un mensaje.
2. Inteligencia emocional y social
Los juegos de mímica pueden girar en torno a un objetivo concreto. Por ejemplo, el lenguaje corporal puede expresar un estado de ánimo, una emoción o un sentimiento. De este modo, alguien interpreta esta información ante los demás mientras los participantes del grupo adivinan el nombre de esa emoción agradable o desagradable. Es decir, los juegos de mímica no solo aportan entretenimiento, sino que también fomentan la educación emocional desde este punto de vista.
3. Descubrimiento de las artes escénicas
El teatro ofrece una interesante oferta de ocio familiar. Las artes escénicas propician el contacto con la cultura y acercan este conocimiento a los niños. El lenguaje gestual y la imitación también forman parte del universo del teatro. Por ello, los niños ejercitan habilidades que se enmarcan en este contexto.
4. Creatividad
Comunicar un mensaje sin utilizar palabras es un reto que fomenta la creatividad infantil. El niño encuentra la forma de transmitir una información a través del lenguaje de su propio cuerpo. Y, en consecuencia, se conoce mejor a sí mismo. Este aprendizaje influye de forma positiva en la coordinación de movimientos, ya que en la mímica intervienen distintas partes del cuerpo.
5. Sentido del humor
Esta experiencia fomenta la diversión en el grupo y, por tanto, dibuja una sonrisa en el rostro de quienes participan en este ejercicio tan creativo.