La arteterapia es una expresión creativa del arte a través del color y sus matices cromáticos como vía de comunicación psicológica y emocional. Esta técnica que no solo pueden experimentar los adultos sino también los niños produce numerosos beneficios en términos de bienestar. Con la ventaja añadida de que en la niñez, esta manualidad puede presentarse como un pasatiempo apetecible. ¿Cuáles son los beneficios de la arteterapia para niños?
1. Una forma de comunicación complementaria a las palabras
Los niños no disponen de los mismos recursos para hablar de su mundo interior que los adultos que se encuentran en una etapa de madurez. Por medio de la expresión que acompaña a la arteterapia, tienen una herramienta a su alcance para mostrar su estado de ánimo, sus miedos, sus sentimientos y sus emociones.
Los niños también tienen preocupaciones propias de su edad, por ejemplo, dificultades que viven en el colegio. Por ello, la arteterapia alimenta el bienestar a través de la expresividad. Esta técnica también puede ser terapéutica en contextos más específicos como la superación del duelo. Por tanto, mejora el estado de ánimo.
2. Capacidad de concentración
La práctica de esta actividad también incrementa el nivel de atención en el presente puesto que el niño se ocupa de su objetivo inmediato. El niño desarrolla su libertad de crear desde su propio punto de vista puesto que sus creaciones tienen su propia esencia. Y esto nutre la autoestima.
3. Desarrollo de la imaginación
El juego forma parte de la aventura de la felicidad infantil. Un ingrediente necesario en su tiempo cuyo recuerdo perdura incluso en la etapa adulta. La arteterapia representa ese valor del juego a través de un ejercicio en el que el niño alimenta su fantasía porque adopta un rol proactivo como protagonista de esta actividad artística de color, líneas y espacio.